Último dia de visita a Pekin, Muralla China y vuelo a Tokyo

Hola de nuevo:

Bueno, continuando la retrospectiva del relato de los últimos días os comento el último día de visita a Pekin.

Estuve mirando días anteriores por la ciudad para ir a la muralla China, esta no esta en Pekin, los tramos mas cercanos se encuentran al menos a 50 Km. de la ciudad. Hay varias zonas que se visitan, aunque la mas famosa y en donde mejor estado se encuentra la muralla es una zona llamada Badaling, a unos 70 Km. La muralla está reconstruida por tramos, y algunos otros está totalmente derruida.

Pues nada, mirando y mirando solamente veía rutas tipo turísticas de estas que te llevan a la muralla, después a comer y después si te venden algún recuerdo mejor. Yo en mis viajes trato de huir de estos temas tanto como de los taxis, pues para esto me voy en viaje totalmente organizado y solucionado. Para mi me resulta fundamental ir a los sitios por mi cuenta y en los propios transportes que los locales (o si no andando), para poder vivir mas de cerca su cultura.

Investigando en Internet y en libro de guía vi que había la posibilidad de ir en un autobús de linea de los chinos hasta allí, pero me preocupaba un poco si me iba a aclarar. Así por la mañana pronto me dirijí hacia la estación de autobuses en la que salia el autobús (para los que quieran mas detalles está debajo de la puerta de Deshegmen, cerca de la parada de metro de Jishuitan, a la salida del metro ya se ve la puerta que es gigantesca) y allí me encuentro a un porrón de autobuses y la estación toda llena de chinos. Pues nada, a buscar el bus en cuestión que era el 919.

Bien, ya vi varios 919 pero en mis investigaciones por la red decían que podían ir a diferentes lugares ¡vaya lío, no se si acabaré yendo a Mongolia o por allí! Por fin encuentro una cola gigantesca toda de chinos con pinta de turista, ningún oriental, y todos subiendo a manadas a autobuses 919. Los autobuses cargaban a gente y cada 5 minutos salia uno lleno hasta los topes. Bueno, pues allá voy yo, a la cola con los chinos. La verdad es que no tardé mucho en subir, aunque los chinos hacen colas inmensas la verdad es que las ventilan rápido. Subo y ahora a ver como se paga, pues yo hacia lo mismo que los chinos, como nadie pagaba allí me metí yo sin pagar. Al final pasa una cobradora y le suelto 12 yuanes, un euro y medio al cambio (para 70 Km. de viaje). Bueno, nos ponemos en marcha y me doy cuenta de que soy el único occidental y para algunos la atracción del autobús. 

Vamos haciendo camino y toma una autovía, al poco hay obras y la conducción se vuele un poco caótica, pues los chinos esto de conducir no lo llevan bien. Me doy cuenta de que aquí se adelanta por el arcén ya que muchos lo hacen. Como a 3 Km. de la llegada otro contratiempo, no se sabe que para pero hay una cola con tropecientos autobuses todos parados por algún problema mas adelante. Después de un buen rato el conductos decide dejarnos allí mismo y la cobradora, con una bandera tipo tour sale y todos siguiéndola detrás con toda la gente de los demás autobuses hasta el final del trayecto.

Al llegar a la zona en donde se supone que se entra a la muralla yo la verdad no sabia que había que hacer ya que todos los chinos (ningún occidental a la vista que aliviara la situación) se ponían ha hacer cola delante de unas taquillas en donde se suponía que estaban las taquillas de entradas. Yo sin saber como iba lo de la entrada a la muralla me puse en la cola y a ver que pasaba. Me toca el turno y por señas pido una entrada, me la dan y la cobradora que parece dirigir el grupo me dirige a otra cola para comprar otra entrada de no se que......Al salir de la muralla ya me enteré que una entrada era para subir y bajar de la muralla china en una especie de montaña rusa y otra para entrar en la propia muralla.

Después de esto decido coger mi rumbo y me dirijo hasta la entrada, allí investigo un poco y me voy a donde empieza la montaña rusa esta. Entro y como puedo me acoplo yo, la mochila y la cámara de fotos a una especie de carrito que me sube por unas vías hasta la entrada de la muralla. Después con la otra entrada entro en la muralla ¡bueno, al final respiraba tranquilo pues la situación perecía estar controlada como así fue!. 

En la muralla hay una riada de gente subiendo y bajando, y como hacia el mismo calor agobiante que en Pekin la gente solía descansar en las torres que van separando los tramos y había que pasas a empujones por allí. Algunos tramos son muy pindios y hay que tomárselo con calma. Desde aquí se ve un buen trozo de muralla que se pierde entre las montañas. Hay una especie de teleférico pero no estaba operativo. Después de andar durante una hora decidí dar la vuelta ya que no era cosa de pegarse la paliza y el objetivo ya estaba cumplido. Así deshice el camino y ahora camino de bajada por la montaña rusa. Un dato importante es que el tren de carritos de la montaña (ver imagen) iba dirigido por un chino que iba frenando a mano el artilugio cuando cogía velocidad. 

Salí del recinto y me dirijo de nuevo a investigar a ver donde y como se hacia para coger el autobús de vuelta. Bueno, observando un poco ya me orienté y de nuevo a la cola para el bus. Ahora ya lo tenia controlado Subo, pasa una cobradora y para Pekin. Los autobuses la verdad es que estaban bastante bien, eran modernos.

Llegada a la ciudad y por la tarde a ver algunas cosas mas y la última la zona en donde se celebraron los últimos juegos olímpicos, con su famoso estadio. Era ya de noche y estaba hasta arriba de gente, aunque aquí ya vi bastante occidental, muchos niños volando las famosas comentas chinas y un gran ambiente festivo. Con esto dí por acabada la visita y vuelta al hotel para dormir que al día siguiente había que tomar el vuelo a Tokyo.

Aquí os quiero comentar que uno de los tópicos de los chinos, que están todo el día escupiendo, yo no lo vi. Si que alguno veías que lo hacia, pero bueno, no había que ir esquivando escupitajos cuando andabas.

Me levanto, acabo de preparar la maleta y pago en el hotel. Me devuelven los 100 yuanes que había que dejar como depósito y camino del aeropuerto por el mismo que la venida. Me sobraron unos 250 yuanes que aún no he cambiado todavía.

En el aeropuerto facturo y me dirijo a inmigración y a pasar la aduana. Todo correcto aunque me pusieron como 3 sellos diferentes de salida uno en cada control.

Como llegué con tiempo aprovecho para comer y enciendo el ordenador. Hay enchufes pero el WiFi no funcionaba.

Subo al avión y en 3 horas y media estoy en Tokyo. El despegue se retrasó como 3/4 hora porque la pista estaba saturada de vuelos. Había como media docena de aviones esperando a despegar.

Este vuelo (de Japan Airlines) lo cogí, junto con un paquete de otros 3 a los demás sitios que voy a través de Finnair y el grupo de aerolíneas al que pertenece llamado One World. Los precios eran ventajosos contratando un viaje anteriormente con ellos. El coste de los 4 vuelos internos fue de 780 € que los pagué a primeros de marzo.

Aterrizamos y a coger la maleta. Todo correcto. Ahora las operaciones de siempre al llegar a un destino nuevo. Primer conseguir moneda local. Me dirijo a un cajero y meto la Visa, saco 2000 yenes y me doy cuenta de que esto es poco (unos 20 €), así que meto de nuevo pero me dice que no me da mas. Tiro de los € en contado que traigo (empecé en Madrid con unos 1250 €) y cambio 200, unos 21000 yenes. Primera prueba conseguida. Ahora llega el capítulo "como llegar a la ciudad y no morir en el intento". Como ya traía la lección aprendida me dirijo a la estación del tren Skyliner. Primer susto y sablazo, unos 23 € del ala que cuesta. Lo estuve mirando por Internet previamente y suponía que valía 10.. Estuve pensando si me habían cobrado por mi y por la maleta, pero al final supe que es que habían instalado en el último mes un nuevo tren tipo Ave que recortaba el trayecto a Tokyo y había subido el precio. Bueno, cojo el tren tipo Ave y me doy cuenta cuando está entrando en la estación que el asiento es numerado. Así que corriendo al vagón que era y al asiento. 

En unos 45 minutos estaba en la estación de Ueno, a unos 70 Km. del aeropuerto. Desde allí a ver como se ponía la cosa para llegar hasta el hotel, ya que eran casi las 11 de la noche. Hubo suerte y estaba fácil, pues no distaba mas de 500 m. de allí. Primer contacto con las calles de Tokyo: todo lleno de letreros de neón, bastante gente por la calle, un calor agobiante, yo buscando en camino al hotel......

Pues nada, en 15 minutos estaba entrando por la puerta sano y salvo. Inmediatamente el recepcionista me pregunta directamente si soy Mr. Rafael Salmón ¡vamos, eficacia japonesa absoluta!. Le pagué con la tarjeta 6000 ya que la Visa me había dado problemas en el aeropuerto y a la habitación. Se trata de un cuarto pequeño pero con todo lo necesario para dormir, hasta con un pequeño frigorífico. El hotel me ha costado por 5 noches 31000 yenes (unos 285 €) y eso que es de lo mas normal, así que fijaros como está el panorama del nivel de vida en Tokyo. Se trata de una especie de Youth Hostelling de lujo.

Pues por hoy nada mas, os dejo algunas imágenes del último día en Pekin.

Turistas subiendo en tropel por la muralla

Vista a lo jejos de la muralla

Uno de los tramos empinados

Ahora a bajar con cuidado

La montaña rusa y el conductor chino del armatoste

El estadio olímpico

Niños volando cometas

Otra vista del estadio olímpico

Esto debia ser en donde estaba la antorcha olímpica

Saludos

Rafa