Corta estancia de dos día en Seul

Hola de nuevo:

Aquí me tenéis de nuevo en otro capítulo del relato del viaje. Actualmente me encuentro en Taipei, la capital de Taiwan, en donde llegué sin mayor novedad esta mañana desde Seul después de haberme levantado sobre las 5 de la mañana ya que el avión era bastante pronto. Esta ciudad de Taipei la he llamado "la ciudad de las motos", pues en ningún otro sitio de mis viajes he visto la cantidad tan impresionante de motos y talleres de motos como aquí.

Bueno, pero esto será otro día ya que lo que os voy a contar ahora es el día y poco que tuve para visitar Seul o al menos parte de el, pues hubiera necesitado al menos un día mas para verlo algo mas en detalle.

El relato lo comienzo el día 22 de agosto pronto por la mañana, pues el avión sale a las 10:00 y al aeropuerto siempre hay que llegar con tiempo. Así que antes de las 6 ya estaba saliendo por la puerta del hotel y ya era de día. En ésta zona suele amanecer bastante pronto y anochecer también pronto. Bueno, yo preferiría que fuese al revés para poder aprovechar la tarde en visitas y que el día se alargase hasta las 9 y pico de la noche como en España en esta época pero bueno, no es así y las visitas hay que acabarlas pronto.

Pues otra vez a pasar por caja del tren del aeropuerto para que me desplumaran otra vez (me enteré no obstante que había otro tren que costaba menos de la mitad, pero al parecer no lo tenían muy publicitado y tardaba bastante mas, así que cojí este ya que no quería tener problemas de tiempo para el aeropuerto). Subí al avión y en dos horas y media aterrizamos en el aeropuerto de Seul. Indicaros que en estos vuelos cortos, aunque no sea la hora de comer te dan comida como si lo fuera y la gente come, bueno mi hora habitual de comida está sobre las 15:30 y no sobre las 11:30 así que yo no comí nada. Hoy en el vuelo de Seul también repartieron comida pero sobre las 11:00 de la mañana o así. Vamos que a esta hora yo a veces no acabo ni de desayunar, y la mayoría de la gente del avión se lo come sin rechistar.

Paso por el control de inmigración, con bastante cola y me ponen un nuevo sellito para la colección en el pasaporte. Después cojo la maleta que casi llego por los pelos ya que por la tardanza de la inmigración ya la iban a retirar de la cinta de recogidas.

Ahora a averiguar donde se coje el tren para Seul (el aeropuerto está en una isla a unos 50 Km. de la ciudad). Antes liquido los Yuanes chinos y Yenes japoneses en una oficina de cambio y me dan mas de 100.000 wones que es la moneda de aquí. Ya casi millonario empiezo la búsqueda del tren.

Bueno, no se dio mal, estaba en la parte baja del aeropuerto, un tren bastante moderno. Saco el billete y para dentro. Como curiosidad indicaros que la ciudad de Seul está bastante cerca de la frontera con Corea del Norte, que como muchos sabréis es uno de los países mas herméticos del mundo debido a su férreo régimen comunista y al contrario que Cuba el turismo allí es una cosa de lo mas exótico. De hecho la linea del tren a Seul pasa en su punto mas cercano a unos 20 Km. de la zona que se conoce como desmilitarizada, una corta franja de tierra de nadie que separa los dos países que antes de la famosa guerra de Corea estaba unidos.

El tren llegue a otro aeropuerto para vuelos interiores de Corea y allí mismo se coje una de las líneas de metro que te deja bastante cerca del hotel. En total el vieja de tren mas metro fueron de casi dos horas y se hizo bastante pesado. Aquí para el transporte funcioné con una tarjeta recargable en las propias estaciones de metro. Aquí ya m,e di cuenta de que es cuestiones de transporte y tecnología, aunque Seul no sea una ciudad tan inmensa como las anteriores visitadas, tenia nada menos que 8 líneas de metro, todas señaladas en coreano e ingles. El coreano no se parece mucho en su escritura al chino o japonés, es igual de incomprensible para nosotros pero sus signos son mas fáciles de dibujar.

En el metro ya me dí cuenta de otra diferencia con las otras ciudades vistas. Al parecer el desarrollo de la red de telefonía móvil era tan alto que se podía ver la televisión por el móvil incluso en el metro sin ningún problema como vi que hacía mucha gente. Del móvil se extendía una pequeña antena y a ver la tele tan tranquilamente. Aquí el problema de adicción al móvil también era importante, y con lo de la TV con otra variante.

Como decía, me deja el metro en la parada, salgo, y por suerte el hotel estaba a unos 300 metros de la parada por lo que lo encontré con facilidad ya que en las calles había de poco en poco mapas con la situación de las calles y los nombres de estas estaban escritas en coreano e inglés. Aquí como en japón hasta los propios coreanos necesitan una pequeña ayuda para llegar a los sitios por lo complejo de las direcciones.

Comí y a dormir un poco para recuperar algo de sueño.

A media tarde ya estaba saliendo por la puerta para empezar la visita. Me acerqué primero a un templo budista en el que por suerte estaban de ceremonia rezando mantras sin parar y con gente orando. Tenían en su interior 3 impresionantes estatuas doradas de Buda. Después visita a una calle típica llena de tiendas de recuerdos para turistas y dado que ya había anochecido poco mas se podia hacer, así que me dediqué a dar una vuelta por la zona en la que está el hotel que por la noche está muy animada con varios centros comerciales todos llenos de gente joven. A final de la tarde una pequeña novedad en el viaje: había empezado a llover un poco, no mucho pero al menos hacia que el ambiente agobiante se refrescara un poco.

Al día siguiente continuación de la visita. Indicaros que Seul es bastante famosa por sus templos y palacios típicos, parte de los cuales forman parte del patrimonio de la humanidad. Así que toda la mañana la dediqué a ir de un templo a otro, aunque con la mala suerte de que por aquí deben andar un poco justos en presupuesto para turismo y los lunes cierran la mayoría de estos palacios. Al final solamente puede entrar en uno, aunque el mas importante, que es el palacio de Gyeongbokgung. El día empezó lloviendo pero fue despejando hasta que al final salió un sol de justicia que picaba cuando andabas fuera de la sombra. Lo malo de la lluvia es que sacar fotos se vuelve algo complicado, vamos que se está bien pero tienen sus inconvenientes. Aunque la mayoría de los palacios estaban cerrados yo visité al menos sus puertas, las cuales como podréis ver en las fotos ya son impresionantes. Uno dio la mala suerte de que aunque estaba abierto solamente hacia visitas guiadas. A ver si mejoran un poco estos coreanos el tema ya que los palacios son muy bonitos, pero si da la mala suerte de que te pilla un lunes la vista estás listo.

Dado el calor que hacía comí en el hotel y a media tarde acabé la visita a Seul en las puertas de otro palacio cerrado y visitando la zona del ayuntamiento ya anocheciendo.

Había planificado mas visitas pero entre la galvana que tienes con el calor y que anochece pronto la verdad que se quedó corta la visita, pero que se le va ha hacer, ya que aunque en un principio pensé en dos días un cambio en un horario de avión a la hora de hacer la reserva en el mes de marzo hizo que añadiera un día a Japón y quitase uno a Seul.

Y dado que al día siguiente el avión para Taipei salia a las 9:30 y para el aeropuerto tenia una tirada me fui al hotel no sin antes comprar un recuerdo de una pieza de madera (aquí son típicas).

Como impresión general de Seul me quedó la de un país bastante avanzado en algunos aspectos, aunque en algunas partes de la ciudad se veía que la gente no vivía tan bien. Los precios de las cosas no son demasiado caros, aunque lo que no hay es mucha oferta hotelera pues no es un destino ´muy turístico. Yo apenas me crucé con ningún turista hablando español, aunque si se veían alemanes, ingleses y franceses, y la ciudad si que tiene cosas que ver, sobre todo templos y palacios, aunque algunos están restaurándose por partes.

Esto es el resumen de los dos días en Seul. Os dejo algunas imágenes de lo visto y fotografiado.

Saludos

Rafa

Imagen de un buda de piedra en un templo

Templo

Dos budas gigantes en un templo

Calle turística comercial

Puerta de acceso a un Palacio

Otra vista de puerta a un Palacio

Pabellón en un Palacio

Otro pabellón de un Palacio

Esto era un museo

Entrada de otro Palacio

Otra entrada a otro Palacio

Zona del ayuntamiento