lunes, 30 de agosto de 2010

Primer día de visita a Hong Kong y viaje a Macao

Hola de nuevo a todos:

Me encuentro apurando las últimas horas de estancia en Hong Kong, de hecho mañana será mi último día de visita, aunque dado que no haré noche en el hotel ya que dormiré en el avión que me lleva de regreso a Europa (primero a Helsinki, en donde tengo que hacer una espera de unas 10 horas hasta el vuelo que me llevará a Madrid), voy a dejar la maleta en un guardaequipajes de la estación central de trenes hasta última hora de la tarde. El avión sale a las doce y media de la noche.
Pues nada, a relatar lo acontecido estos dos días.

El día 28 fue en realidad el primer día oficial de visita a Hong Kong, ya que el día anterior ya había visto algunas cosas pero ya de noche.

Por la mañana acabé de ver la zona centro, llena de rascacielos, aunque también quedaba hueco para otro tipo de edificios mas modestos escondidos entre el mar de rascacielos. Hay un pequeño zoológico y jardín botánico, situado en una colina. Indicaros que Hong Kong no es totalmente plana, sino que tiene unas colinas a su alrededor que hace que algunas calles tengan una buena cuesta. Durante la mañana cayó un buen chaparrón que pilló a muchos de improviso y se veía pasar a la gente totalmente calada. Muchos turistas somos previsores y llevamos siempre un paraguas y un chubasquero. Dado el calor que hace el chubasquero ni se para por la cabeza ponerlo. De hecho los que se iban mojando es como si se fueran duchando con agua templada, vamos, que a algunos hasta les refrescó. Tuve que parar casi una hora hasta que escampó. Lo bueno fue que refrescó el ambiente que hacia falta.

También pude ver la catedral, que por la herencia británica es anglicana. Esta herencia inglesa también se puede ver bien en los autobuses y tranvías de dos pisos que hay por la ciudad (aunque de los tranvias de dos pisos no recuerdo si en Londres los había), en las matrículas de los coches, que se parecen mucho a las que vemos cuando el Ferry suelta a los turistas, y a la conducción por la izquierda y situación del volante a la derecha.

Después cambié de zona y entre lo mas interesante visto estaba un parque artificial que han hecho entre los bloques de rascacielos, con un aviario bastante interesante, y el centro de convenciones de Hong Kong, con un gran centro comercial con multitud de tiendas. Aquí centros comerciales hay a cada vuelta de la esquina, lo mejor para los que no nos llaman demasiado estos centros es que pasear por dentro de ellos con el aire acondicionado que tienen se agradece bastante, así que siempre entro un poco en alguno para refrescarme.

Para acabar el día visité una zona cercana a la bahía en la que hay una barrera artificial hecha de juncos para mitigar el paso de los ciclones, aunque como ya era de noche no lo pude ver. Después pude leer que hay alguno mas por la zona. Parece ser que son bastante comunes por aquí.

Antes de acercarme al hotel visité de nuevo el supermercado para hacer las últimas compras del viaje y poder tirar así hasta el regreso a España. El comprar sale caro, aunque no tanto como en Tokyo.

Una cosa que sale bastante barata son los viajes en metro. Yo me estoy gastando una media de medio euro por cada viaje, y aunque no son demasiado largos al final del día hago unos cuantos.

El dia siguiente era el programado para la visita a la ex-colonia portuguesa de Macao y ahora como Hong Kong tiene un estatus de región administrativa especial. Este territorio es bastante mas pequeño que la región de Hong Kong, y está formado por la península de Macao y algunas islas.

El viaje lo comencé en el puerto de la isla de Hong Kong, en donde un barco rápido de linea me llevó en apenas una hora a la península de Macao, que está a unos 75 Km. De distancia de Hong Kong. Dado que Macao es un país diferentes hay que pasar por inmigración en donde te ponen sello de salida de Hong Kong y entrada en Macao, aunque para los españoles con el pasaporte basta. El trámite de inmigración de salida en Hong Kong fué rápido, pero el de entrada en Macao fué largo, unos ¾ hora, ya que era domingo y los barcos descargaban gente sin parar. Fijaos que la frecuencia de las líneas es de unos 15 minutos cada salida, y hay dos compañías de barcos principales que hacen el trayecto.

Me fijé que en inmigración pasaban bastantes turistas filipinos, lo cual me sorprendió bastante.

Lo primero que te ocurre cuando sales de la terminal marítima es que esta literalmente tomada de azafatas y empleados de los casinos de la ciudad. Muchos ya sabréis que Macao es la ciudad del mundo que mas casinos tiene por habitante, y con razón que es así por lo visto en la ciudad ¡y menudos casinos!, vamos que aquello parecía una especie de Disneylandia pues cada uno estaba recreado de una forma diferente. Muchos no tendrán nada que envidiar a los de Las Vegas.

En la salida está llena de autobuses que te llevan directamente a los casinos, los mas importantes tienen uno o varios que van haciendo trayectos cada poco a la ciudad. No obstante, pude leer que esto con el tiempo se ha transformado en un servicio mas de transporte regular, y puedes coger cualquiera de los autobuses para los casinos para ir a la ciudad aunque después no entres al casino.

La parte interesante de la ciudad está a un kilómetro y medio de la terminal de barco, por lo que yo fui andando poco a poco haciendo fotos bajo un sol de justicia. La ciudad es bastante grande para lo que me imaginé, aunque tiene bastantes zonas del centro (el centro está declarado patrimonio de la humanidad de la Unesco) en un estado bastante decadente.

El centro histórico legado de los portugueses parece en muchas ocasiones una ciudad mediterránea, con multitud de inscripciones en portugués y chino. No obstante, yo no oí hablar portugués en ningún sitio, por lo que a efectos prácticos los idiomas usados son el chino y el inglés. La mayoria de los establecimientos aceptan pagos en dólares de Hong Kong, aunque tienen su propia moneda. El país es una especie de Mónaco pero a lo pobre. Los casinos deben reportar bastante dinero vista la fastuosidad de alguno y el dinero que tienen que hacer costado construirlos.

Por aquí los jesuitas también estuvieron bastante tiempo y hay bastantes huellas de iglesias. Uno de los símbolos de la ciudad es la fachada de una iglesia que se quemó hace casi doscientos años. La zona centro no es muy extensa, pero estaba abarrotada de turistas, de hecho no recuerdo haber visto tanto turista junto en todo mi viaje, aunque ayudaba el que era domingo.

A las ocho de la tarde cojo el barco de regreso a Hong Kong, en este caso de otra compañía que me deja en un muelle diferente del de salida en la zona de Kowloon. Nuevamente ha hacer los procedimientos de inmigración de salida de Macao y entrada en Hong Kong con el sellado del pasaporte. El coste del viaje de ida y vuelta costó unos 30 € al cambio.

Bueno, una corta visita a Macao, pero bueno, me alegré ver bastantes edificios con inscripciones en portugués que entendía sin problemas. Una anécdota es que durante unos 50 años que Portugal perteneció a España esta colonia podríamos decir que fué también española. Macao fué la primera colonia europea en Asia y esto ocurrió algo después del año 1500.

Pues nada, esto es todo por ahora. Os dejo algunas fotos de los visto estos dos días.

Saludos


Rafa



Rascacielos de Hong Kong

Calle de Hong Kong

Esta es la catedral de Hong Kong

Otra zona de rascacielos

Rascacielos y puerto

Rascacielos y puerto

Parque

Mas rascacielos

Esto ya es Macao, vista de un largo puente

La zona de los casinos es lo primero que se ve

Esta es una recreación de edificaciones romanas

Edificio modernista en Macao

Otro de los casinos

Las calles están escritas en portugués y chino

Este es el gran casino de Lisboa, el mas espectacular

Zona histórica de Macao

Zona histórica de Macao

Sencillo templo

Iglesia de la que únicamente se conserva su fachada principal

Las calles abarrotadas de turistas

Sencillo templo

Una de las calles de Macao

Vista de la zona de los casinos de noche

sábado, 28 de agosto de 2010

Último día de visita a Taipei y viaje hacia Hong Kong

Hola a todos:


Ahora os escribo desde la última etapa de mi viaje que no es otra que Hong Kong, en donde voy a visitar tanto este territorio como el cercano de Macao.
Comenzaré por el último día de visita a Taipei, que fue el 26.

Por la mañana lo pasé nuevamente visitando algunos templos y mercados. De paseo de uno a otro sitio pasabas por diferentes calles en las que podías ver la actividad diaria de la gente. Como os comentaba, dado que hay muchas motos hay talleres a cada esquina. Algunos está bien, pero otros están en un estado tan lamentable que es para echarse a llorar, con todo tipo de piezas esparcidas por el suelo, pero bueno, me imagino que estos últimos serán para los que no tengan mucha pasta para el arreglo de las averías. En muchos talleres se hace vida diaria, se hace la comida en unas ollas, les ves viendo la televisión cuando no hay trabajo, algunos tienen incluso un pequeño altar con velas con el buda de turno, etc.
La mayoría de las calles tienen soportales debajo de los cuales están los negocios de la gente. Los restaurantes de comida para los locales, debido al calor (no hay dinero para aire acondicionado) están todos abiertos a la calle, con lo que salen todos los olores y se les ve haciendo sus guisos cuando pasas.
Por muchos de los lugares que andaba no veía ni un solo occidental, solamente cuando llegaba a una zona mas o menos turística con algo que ver ya veía a alguno. Por esto a veces te sentías el raro del barrio, paseando entre todos los vecinos. Bueno, tampoco pasaba nada porque no detecté ningún problema de seguridad ya que la gente iba a lo suyo.
Por la tarde visité un gran centro comercial pero no para comprar, sino para ver su diseño que era bastante peculiar, como una especia de pelota de golf gigantesca. Después vi el estadio de la ciudad y el ayuntamiento, y por fin me acerqué ya de noche a uno de los platos fuertes del día. La visita a la torre Taipei 101, que es actualmente el segundo edificio mas alto del mundo después de uno que hay en uno de los emiratos árabes. Subí hasta el piso 90 y había la posibilidad de ver tanto desde unas cristaleras como desde el exterior, en donde a pesar del calor ya se notaba algo fresco. Las vistas de la ciudad eran estupendas. En este piso también se puede ver una gigantesca esfera metálica que regula la estabilidad del edificio y por lo que pude entender era única en el mundo. Estaba hasta arriba de turistas y subir tenia un costo de algo mas de 10 € al cambio. Bueno, debido a que es un edificio de recor Guinness merece la pena subir.

Y con esto di por finalizada la visita a Taipei. Al hotel y a dormir que al día siguiente tocaba volar a Hong Kong.

Como resumen de la visita comentaros que realmente la ciudad me gustó, ya que no es muy turística y esto te permite ver muchas cosas que en otras ocasiones al prepararlas de cara al turismo pierden su encanto. La gente tiene gran apego a sus costumbres, prueba de ello es la cantidad de templos que tienen y los ritos que hacen en la calle. El tema de las motos la hace una ciudad bastante peculiar. Se veían bastantes motos de la marca Kymco que en España ya se ven desde hace un tiempo. Bueno, realmente en las calles de Taipei tienen un campo de prueba único.

Al día siguiente a las nueve y pico ya estaba saliendo del hotel para coger el metro hasta la estación central en donde cogería el autobús para el aeropuerto. La entrada de metro mas cercana coje lejos, a un cuarto de hora andando a buen paso. Están terminado una línea nueva que dejará el metro mas cerca. De camino al aeropuerto me fijo en que están construyendo bastantes tramos de autovía. Una vez en el aeropuerto, a facturar de nuevo con Cathay Pacific Airlines hacia Hong Kong y dado que llegué bastante pronto me dieron un vuelo una hora antes. Pasé de nuevo por inmigración y me pusieron el sello de salida del país.

En poco mas de una hora y media ya se avistaba por las ventanillas los rascacielos de Honk Kong. El aeropuerto, que no es muy antiguo, está situado la mayor parte en tierras ganadas al mar. El territorio en si se llama Región Especial Administrativa de Hong Kong y ahora forma parte de China, aunque con un estatus especial debido a su singularidad. A grandes rasgos está formada por la isla de Hong Kong, la isla de Lantau y después ya una zona continental en donde está Kowloon y lo que se conoce como los nuevos territorios. El meollo de la ciudad está en la parte norte de la isla de Hong Kong y en Kowloon. Gran parte de la región es bastante montañosa y bastante verde (desde el avión se aprecia bien).

Una vez en el aeropuerto paso los controles habituales de inmigración, con un nuevo sello para el pasaporte, y de aduana y salgo al hall del aeropuerto. Allí investigo un poco sobre como va el asunto de los transportes y compro una tarjeta que se va recargando con dinero en las estaciones de metro, vamos, que en todos los sitios es muy similar por lo que no hay mayores problemas para cogerle el truco. Para ir a la ciudad, se coge un tren que en menos de media hora te deja en la estación central de trenes y de allí trasbordo a la línea de metro que me deja a poco menos de 100 m. de la entrada del hotel. Las indicaciones del metro son claras en idioma local e inglés, sin ningún problema para orientarse.

El hotel es uno de la cadena Ibis en la isla de Hong Kong que me ha costado unos 150 € por tres noches (de lo mas barato que encontré, ya que aquí el alojamiento es caro). Las habitaciones no son muy grandes, pero las vistas son buenas y tiene aire acondicionado y un mini frigorífico.

Comí tarde y después ya de noche me acerqué a la zona centro ha realizar las primeras visitas. Allí empecé ha hacer fotos a los rascacielos de la zona, aunque como era de noche algunas no quedaban demasiado bien. Aquí los autobuses son de dos pisos, como en Londres aunque de diseño moderno. Lo que si tienen realmente antiguos son unos tranvías también de dos pisos. Los autobuses y tranvías no hacen mas que pasar y le dan un gran ambiente a la zona ya de por si abarrotada de gente. Veo algunos edificios como el de la sede del banco local HSBC diseñado por Foster y que resultó es su época el mas caro del mundo y eso que no es un rascacielos gigantesco. La zona también está plagada de sedes de otros bancos con grandes rascacielos y algunos edificios oficiales.

Mas fotos y para el metro de regreso al hotel. Salgo a las calles de la zona del hotel y busco un supermercado. Hay muchos de 7 Eleven, todas las ciudades en las que he estado tienen, pero realmente a mi no me gustan ya que son muy pequeños y no encuentras muchas cosas como fruta . Como a medio kilómetro encuentro uno grande y surtido, cierran a las 11 de la noche y falta un cuatro de hora, entro y empiezo a cargar cosas. Como siempre hay que investigar un poco que es lo que compras, las fotos ayudan bastante en el asunto.

Después cargado al hotel y a relatar lo ocurrido, aunque esta vez el Internet es de pago (cuesta algo mas de 4 € 3 horas) y lo dejo preparado para el día siguiente que es cuando me conectaré.

Como siempre dejo algunas imágenes de los visitado estos dos días.

Saludos

Rafa

Ardilla en un parque de Taipei

Templo, si ampliais la imagen vereis el tejado decorado con dragones

Tren elevado en Taipei

Aunque parezca la estrella de la muerte de la Guerra de las Galaxias es un centro comercial en Taipei

Ayuntamiento de Taipei, fijaos la temperaura una hora y media después de haber anochecido

Piso 91 de la torre Taipei 101

Cambiamos de ciudad, rascacielos en Hong Kong

Mas rascacielos en Hong Kong

Edificio de estilo clásico al lado de rascacielos

Trancia de dos pisos en Hong Kong

Aquí también se hacen eco de la victoria de la selección

miércoles, 25 de agosto de 2010

Primeros dos días de visita a Taipei

Hola de nuevo:


Aquí me tenéis de nuevo, ahora en otro país diferente como es Taiwan, concretamente en su capital Taipei.

La llegada fue el día 24 en un avión de la compañía Cathay Pacific. Bueno, mejor comiendo desde por la mañana. El día empezó pronto, sobre las cinco de la mañana ya estaba saliendo por la puerta del hotel para dirigirme al aeropuerto y coger el avión que salia a las 9:30. Dado que tenia casi una hora de trayecto en metro y casi 3/4 de hora en tren había que salir pronto por si había algún contratiempo. Al final no ocurrió nada, facturé y para el avión. El tema de la maleta lo tengo que controlar bastante ya que el límite son 20 Kg. y como siempre llevo bastante comida cargada y voy comprando algún regalo y acumulando algo de información turística hay que estar al loro para no pasarse. En la mochila de mano siempre llevo lo mismo y como está a tope tampoco entra mas.

En dos horas y media aterrizamos en el aeropuerto de Taipei y atraso el reloj una hora, ahora tengo 6 horas de diferencia con España que ya mantendré también en Hong Kong. Lo malo es que a las seis y media de la tarde ya es de noche. Paso inmigración, un nuevo sello al pasaporte y paso aduana sin problemas.

Bueno, ahora aquí el ir a la ciudad era algo diferente, había que coger un bus que tardaba unos tres cuartos de hora. En Internet ya había visto que habia varias líneas, cuando llego a donde se sacan los billetes cojo una que parece tener buena pinta, pago 125 dólares taiwaneses y para la ciudad. Hacia varias paradas pero yo me bajé en la última, en la estación central de trenes y autobuses, aunque me quedaba mas cerca otra. Como información para algún posible interesado la compañía del bus es la Kuo-Kuang y el número del bus es el 1819. Para coger el trayecto de vuelta es algo mas complicado, ya que a la ida te deja en la calle y a la vuelta hay que dirigirse a la dársena de salida. En la estación central hay que dirigirse a la salida M5 y después en la estación West de autobuses a la salida K12. Hoy estuve investigando este asunto.

Desde allí para el metro y a investigar como iba este tema. Ya también había mirado algo previamente y cogí un billete válido por un día, aunque al día siguiente cogí una tarjeta recargable en las máquinas de las estaciones del metro. En el metro hay que andar un poco al loro ya que suele haber alguna gente que anda buscando desorientados cargados de maletas como yo para aprovecharse un poco. A mi me asaltaron dos (te empiezan preguntando si buscas algo). Lo mejor como he comentado es hacer como que ni los ves ni que existen.

Una vez en el metro la estación no estaba muy lejos. Las indicaciones están en idioma local e inglés y todas las estaciones y el metro en general está correctamente. Salgo por la estación y ahora llega el momento de ver para donde tirar ¿derecha?, ¿izquierda? ¿frente?, aquí el preguntar no sirve de nada porque nadie te va a entender en inglés. Bueno, menos mal que de vez en cuando estos taiwaneses tienen en las calles un plano que me ayudó en el asunto. Pues nada, que era para la izquierda por una calle bastante animada.

Primera impresión de la ciudad: ¡había motos por todos los sitios!, en la carretera era mayoría de vehículos, en las orillas de las aceras prácticamente hasta arriba de ellas aparcadas, pequeños talleres a cada manzana. Vamos, que en mi vida había visto nada parecido. Hay carriles especiales para motos, en las gasolineras hay entradas específicas para ellas. Cuando llegas a un semáforo en rojo, las motos empiezan a ocupar la parte delantera del semáforo y los coches se queda detrás. He llegado a ver mas de medio centanar de motos que en apenas un minuto se acumulan en un semáforo cerrado en varias líneas. Cuando el semáforo se abre es como cuando bajan la bandera en un gran premio de carreras de motos. Por esto el mejor sobrenombre de la ciudad es la ciudad de las motos. Para que os hagáis una idea os dejo un enlace de un vídeo de Youtube (el vídeo no es mio, yo hice alguno pero no de mucha calidad) y os hagáis una idea aproximada del asunto. Lo que veis en el vídeo es algo muy habitual en los semáforos. La mayoría de las motos son de tipo scotter de entre 50 y 125 cc.. Es raro verlas de mayor cilindrada. Mucha gente va con mascarilla en las motos. 

Segunda impresión de la ciudad: Imaginaos lo siguiente: a lo largo de una calle hay varias mesas corridas encima de las cuales hay varios alimentos, desde un pato asado, pasando por unas galletas, fruta, bebida, etc. Encina de la mesa hay varias varillas humeantes de incienso. En frente de la mesa hay una especie de caldero con papeles ardiendo dentro, unas buenas llamas y humareda saliendo del mismo y un tipo echando una especie de papeles sin para al caldero. Pues esto es ni mas ni menos una de las estampas que se puede ver con frecuencia en Taipei y que me encontré con estupor nada mas llegar. Por lo que he podido investigar y pensando un poco deduzco que es una especie de ritual purificador de alimentos. Os informaré si se algo mas.........

Tercera impresión de la ciudad: aquí mucha gente anda con mascarillas por la calle, el metro, las tiendas. Deduzco que las condiciones medioambientales no son muy buenas. Es la ciudad donde mas mascarillas he visto.

Con estas impresiones pensaba que mi estancia en Taipei no iba a ser tan aburrida como pensaba.

Después de andar casi un kilómetro llego al hotel sin novedad pero chorredando sudor. Pago casi 150 € por la estancia (3 noches) y llego a la habitación (el hotel es bastante bueno, un tres estrellas de España, con un pequeño frigorífico). Como y a dormir un poco la siesta para recuperar algo de sueño. Por la tarde comienzo la visita por la zona centro.

Visité algunos templos, alguno de ellos abarrotado de fieles con gran devoción rezando mantas budistas. Por la calle te encuentras de cuando en cuando algún monje budista. En los templos el ambiente está cargado de incienso y humo y con los cantos de los mantras y los fieles rezando se crea un ambiente especial. Los templos está abarrotados de comida, como el ritual indicado antes pero en este caso a escala industrial. Aquí ya no valía ni pato ni manzana no lata de Coca-cola, aquí se hacia a lo grande, grandes sacos que debían ser de trigo, arroz y otras materias primas se amontonaban en las esquina. Bueno, tampoco faltaba comida algo "menor" pero lo que mas llamaba la atención eran los sacos. No se si después les ponían algún sello que dijera: "purificado el día tal en el templo tal" para poderlo vender como garantía de calidad, je, je. Tampoco faltó la visita a algún mercado nocturno. Toda la comida la preparaban en la propia calle, bueno, me imagino que bastantes de los potajes no es que estén muy saludables, aunque igual la población ya está inmunizada. En uno de los mercados tenían varias serpientes gigantescas amarillas. No debían ser venenosas porque el que las cuidaba de vez en cuando las movía algo ya que la mayoría estaban durmiendo y no se revolvian ni nada.

Acabadas las visitas, me acerqué a un supermercado de Carrefour a comprar ya a echar un vistazo a los alimentos made in Taiwan. Bueno, allí había toda clase de cosas totalmente desconocidas, aunque al menos pude encontrar algunas cosas aptas para mi dieta, incluso fruta y hasta pan tipo baguette. La compra la pude hacer sin mayor novedad ya que los precios estaba indicados y me iba orientando por las fotos, los envases y alguna inscripción en inglés cuando la había. Aquí las manzanas las vendían por unidades y los plátanos al peso. Al hotel y a dormir.

El día de hoy también ha sido bastante productivo. He estado viendo algunos templos mas, budistas, confucionistas. Bueno, la verdad es que para los que no conocemos estos temas todos nos parecen iguales pero tienen sus diferencias. En esencia uno de estos templos está formado por un edificio central mas o menos cuadrado que hace de altar rodeado de un patio en el que a su alrededor hay un corredor con una especie de altares menores y otros lugares de oración mas pequeños. Todo los techos están decorados muy ricamente y el color de los tejados es predominantemente rojo. También vi el edificio presidencial, inmenso, y unos edificios preciosos, de postal (ver fotos), que pertenecen al teatro de la ciudad. Al lado hay un mastodóntico monumento dedicado al creador de la nación Taiwanesa.

La isla también se llamó Formosa, del portugués, ya que por aquí andaron también holandeses, portugueses y hasta españoles. En las afueras de la ciudad hay una especie de fuerte de origen español. Como les quedaba bastante lejos de casa todos estos países fueron dejando paso a gobiernos mas locales o invasores mas cercanos.

Realmente la ciudad es bastante interesante, pues aquí choca mucho el desarrollo tecnológico de la isla con los frecuentes apegos que tienen a ritos y religiones, que en otras ciudades de mi viaje no he visto tanto como aquí. Sin ser una novedad indicaros que el calor es igual de intenso que en las demás ciudad en las que he estado.

Turistas no se ven demasiados, la verdad es que a veces paso bastante tiempo sin ver ningún occidental que salta rápido por sus rasgos. Tanto aquí como el Seul no he escuchado a nadie hablar español. ¡Bueno!, seguramente no conoceréis a muchos turistas que os digan que hayan pasado unas bonitas vacaciones en Seul o Taipei.

Pues nada mas por ahora, próximamente mas aventuras "made in Taiwan"


Saludos


Rafa


Ritual para purificar alimentos

Teatro chino en la calle

Templo

Purificando alimentos en el templo

Altares menores en la parte trasera de un templo

Mercado callejero

Serpiente en mercado callejero

Nuevamente el rito de purificación

Calle comercial

Las motos saliendo cuando se abre el semáforo

Edificio presidencial

Edificio con pinturas

Monumento al fundador de Taiwan

Teatro de la ciudad

Monumento al fundador de Taiwan

Teatro de la ciudad

Templo

Templo